Escuchando el golpe seco que hay detrás de todas las puertas que se cierran con dolor.
La rabia nunca fue mia, ni si quiera quise acogerla.Se sentó a mi lado y me hizo creer que no estaba viva.
Que yo debía seguir en pie cual pilar de piedra, pero la carne es débil y el alma nunca muere.
¿Y qué si decidí romper con todo?¿Que pasa si al final fui capaz de partirme los dientes contra el asfalto con tal de ver brotar algo que saliera de mi?
He tocado el frío fondo demasiadas veces cómo para saber que no es mi lugar.
Quiero vivir.
Y no creo que sea un pecado intentarlo.
Quiero liberar mi alma y que deje de arañarme el estomago cada vez que me sometes a tu juicio.
Mi vida es mía y yo decido que hacer con ella.
Abrirle la cabeza a alguien no te va a hacer ver lo que hay en ella.
Jamás voy a intentar que sientas lo que yo, no quiero que te pongas en mi lugar.
No quiero ni si quiera que lo entiendas.
Solo quiero que sepas que esto es así.
Que una vez comida por dentro ya no me queda nada más que intentar recomponerme.
Que las ganas jamás las voy a perder aun que a veces no sepa dónde las he puesto.
Y nunca quise ser de piedra, siempre preferí ser de agua y dejarme fluír.
Asi que no me obligues a fingir.
Prefiero llorar mil veces hasta quedarme sin lágrimas.
Si, soy un caos.
Pero yo elijo ser así.
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