Felicidad es saber que me imaginas entrando en el metro y sentandóme a tu lado cómo una desconocida.
Es soñar contigo y tus manos cómo cuando aún no las conocía y comprovar, que mi piel se erizaba entonces igual que lo hace ahora.
Es oír tu risa cuando te hago cosquillas, y que te retuerzas y te me escabullas entre las sábanas.
Felicidad es tu cabeza en mi pecho escuchando con atención todo lo que cuentan mis latidos en ese idioma que tu desconoces.
Es mi mano perdida entre tus rizos. Y verte esperando por mi en la estación desde la ventana del autobús repleto de gente y hacer ver que no se que me has visto.
Es llenarte la boca de dulces en medio de la calle y esconder tu mano bajo la manga de mi jersey.
Felicidad es saber que existes y lates.
Que lloras y ríes, y sientes y amas y dueles y hablas sin pensar y callas sin saber.
Felicidad son tus pies rozando con los mios de buena mañana y antes de irnos a dormir.
Son tus ojos reflejando los mios cada vez que me miras, y tus labios por toda mi cara regalandome todos esos besos que siempre quise tener.
Son noches en vela jugando a ser exploradora de tesoros escondidos en cada una de las capas de tu piel.
Son tus ganas de comerme y las mías de arañarte.
Felicidad son todos esos tu y yo que se transforman en nosotros cuando hablas de ti y de mi.
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